El tai chi es una forma de realizar ejercicio muy saludable y reporta beneficios evidentes en muy poco tiempo. Aunque es un ejercicio lento y suave y no es de los que acabas sin aliento, trabaja los componentes clave de la aptitud física: la fuerza muscular, la flexibilidad, el equilibrio y, en menor grado pero también, el acondicionamiento aeróbico.
En China, se cree que el tai chi puede retrasar el envejecimiento y prolongar la vida, incrementar la flexibilidad, fortalecer los músculos y los tendones, y ayudar a mejorar ciertas enfermedades como las del corazón o problemas de tensión alta, así como la artritis.
El tai chi fortalece tanto las extremidades inferiores como las superiores así como los músculos de la base de la espalda y el abdomen.
Mejora el equilibrio y, según algunos estudios, reduce el riego de caídas. La propiocepción, que define de algún modo la capacidad que tiene uno de detectar la posición del cuerpo en el espacio, se reduce y deteriora con la edad. El tai chi ayuda a entrenar y mantener esta función.
Si a estos tres grandes beneficios unes los siguientes, encontrarás en el tai chi una nueva forma de practicar ejercicio saludable y sobre todo podrás practicarlo durante toda la vida.
1. No es una moda pasajera
A diferencia de otros muchos ejercicios, el tai chi no es una nueva moda que desaparecerá tan rápido como lo hacen otras. Lleva practicándose más de mil años en China.
2. Es un ejercicio para todos
El tai chi es un ejercicio de movimientos suaves y moderados, por lo que cualquier persona de cualquier condición física puede practicarlo.
3. Incrementa la fuerza, el equilibrio y la resistencia
El tai chi ha demostrado ser un ejercicio con beneficios significativos en materia de equilibrio, de fuerza, flexibilidad y de resistencia muscular.
4. Reduce el asma
Parece ser que el tai chi es muy beneficioso para los enfermos de asma, gracias al modo en que se realizan respiraciones profundas con cada movimiento.
5. Mejora la capacidad aeróbica
La capacidad aeróbica disminuye a medida que envejecemos, pero puede mantenerse si se entrena de forma regular. Así, en otro estudio realizado para comprobar los efectos del tai chi sobre la salud, descubrieron que los individuos que practicaban tai chi con regularidad durante un año mostraron mayor capacidad aeróbica que los individuos sedentarios de la misma edad.
6. Reduce el estrés
La respiración junto con la concentración con la que se debe de realizar cada movimiento de tai chi supone un modo efectivo de relajación. La conexión mente y cuerpo para realizar cada movimiento con la concentración requerida y con la respiración adecuada promueve la relajación y evita el estrés. Es meditación en movimiento.
7. Mejora la movilidad
La velocidad con la que nos movemos caminando se reduce con la edad. En un estudio, se encontró que los individuos que practican tai chi caminaban significativamente más rápido que aquellos que no lo practicaban.
9. Bueno para las articulaciones
Muchas formas de ejercicio someten a los hombros, las rodillas, la espalda y otras articulaciones a una tensión excesiva, no natural, por lo que terminan desarrollando problemas en las articulaciones. El tai chi clásico en cambio las protege, fortalece la musculatura que ayuda a mantener las articulaciones ‘sanas’, promoviendo posturas correctas que ayudan a corregir problemas en las mismas.
El tai chi te enseña a soltar las articulaciones, relajar el cuerpo y modificar la postura poco a poco con el fin de evitar sobrecargas inconvenientes de las articulaciones.